lunes, 14 de diciembre de 2009

La importancia de la educación vs. la gripe AH1N1

La educación en Puerto Rico actualmente atraviesa uno de los peores momentos en los que su imagen ha sido afectada como consecuencia de problemas con la política gubernamental del país. Sin embargo, no es nueva la noticia que el departamento de educación no está haciendo su trabajo correctamente, o que las escuelas no se encuentran en condiciones para dar clases. El deterioro de la planta física educativa no es más que el reflejo del deterioro en todo un sistema de gobierno, ya que a través de la educación es que progresa un pueblo. Es cierto que en la actualidad, la educación de nuestro sistema público de enseñanza ha disminuido en calidad y eficiencia, sin embargo estos efectos son por la falta de atención de la comunidad en general y la carencia de apoyo hacia muchos maestros innovadores que no reciben el respaldo ni de padres ni de las agencias administrativas para realizar cambios en pro de la educación, por lo que tampoco es necesario hacer señalamientos relacionados a la responsabilidad sobre quien recae la educación. En estos momentos por los cuales el sistema educativo del país está atravesando una crisis, enfrentándose a un año escolar diferente y con otra complicación, entiéndase la gripe AH1N1, es necesario trabajar en equipo compartiendo la responsabilidad de educar a toda la comunidad de aprendizaje acerca de la enfermedad, de sus síntomas y cómo prevenirla. También es necesario el esfuerzo en equipo para mantener la infraestructura adecuada para la enseñanza, pero no desviar nuestra atención de la meta principal de las escuelas, la cual es educar, ya sea en tiempos con gripe o sin gripe. Además, se le debe prestar atención a las necesidades académicas de los planteles, y buscar las maneras para adquirir equipos como computadoras, libros, internet, pizarras nuevas, entre otros. Considero que estos asuntos son de mucha más relevancia que hacer mil preparativos por la gripe, que sigue siendo un asunto importante que con las debidas precauciones se puede mantener bajo control, mientras que las necesidades de la escuela siempre han estado y estarán por lo que deben ser atendidas, a manera que la calidad de la educación mejore y el pueblo de Puerto Rico progrese.

Diferencias generacionales

La sociedad, está conformada por distintos grupos de personas que a su vez se diferencian entre ellas por su manera de ser y forma de pensar. A estos distintos grupos se les conoce como generaciones. La palabra generación se puede definir como conjunto de individuos que nacen en una época o período similar de años y que tienen en común características culturales, morales, creencias, manera de pensar y vivir que han marcado la época en que crecieron y sus vidas.
En la actualidad, en Puerto Rico nos encontramos coexistiendo cuatro generaciones distintas. Estas lo son los “baby boomers”, la generación X, la generación Y, y la generación Net. Cada una ocupa un lugar en nuestra sociedad y una labor distinta. La gran mayoría de los baby boomers están comenzando a retirarse de los empleos, la generación X conforma casi toda la fuerza laboral del país, la generación Y se están graduando de las universidades e incorporándose al mundo del trabajo, mientras que la generación net se encuentra en las escuelas. A pesar de que todos somos distintos podemos convivir, el secreto esta en conocernos y aceptarnos, poniendo en contexto las diferencias que puedan surgir por la diferencia de edades, ya que entiendo que si las generaciones se clasifican de acuerdo a la época en que se nace, también las clasificaciones surgen como producto de las modas y necesidades de las mismas.
En el caso de los baby boomers, se dice que son unos adictos al trabajo y que deben avanzar a retirarse para que otros puedan trabajar y ocupar sus puestos. Sin embargo, si se analiza la época en que se criaron los baby boomers hay que entender que si no se trabajaba no se comía. En mi caso en particular mis papás son baby boomers, y mi papá siempre dice “el trabajo dignifica a el hombre”, y aunque se retiró hacen nueve años, sigue madrugando y trabajando en la finca aunque esté cansado porque desde pequeño tuvo que trabajar. Por lo tanto, el trabajo a él lo hace feliz, sobre todo si es en una finca.
Por otro lado, la generación X no se considera adicta al trabajo, mas bien tratan de tener un estilo de vida balanceado, aunque desde mi punto de vista en Puerto Rico todas las generaciones tienen entre uno y dos trabajos para poder con los gastos de la economía que cada vez aumentan más. En lo que a balance se refiere, es quizás le dan igual de importancia a trabajar y a descansar tomándose unas vacaciones.
En cuanto a las generaciones restantes, generación Y y generación Net, creo que ambas son muy parecidas y tienen en común el amplio conocimiento y acceso que tienen a la tecnología. Si bien esto es muy positivo comparto la preocupación general de que ambas generaciones, incluyéndome yo en ellas, pasan demasiado tiempo en la computadora y debe dársele igual importancia a las actividades que impliquen interacción con el ambiente y otras personas.
Para resumir, como ya mencioné antes todas las personas estamos clasificadas dentro de una generación u otra por nuestras características que nos diferencian de los demás, sin embargo estas diferencias no nos impiden coexistir, la clave siempre va a estar en saber entendernos.